FOTOGRAFÍA ÉTNICA (Eric Lafforgue)

1. ¿Cómo te llamas? ¿De donde eres? ¿Con qué otras actividades compaginas la fotografía?

Mi nombre es Eric Lafforgue, soy francés y vivo en Toulouse. Al margen de la fotografía, tengo una compañía multimedia llamada “La crea Multimedia”, que trabaja en telefonía móvil, televisión, video, ¡y por supuesto fotografía!.

2. ¿Por qué haces fotografías? ¿Y qué tipo de fotografía te atrae más?

Hago fotografías para compartir y divertirme. Me gusta descubrir el mundo a través de las imágenes de otros fotógrafos, y por eso trato de compartir las mías. Dado que me atraen las regiones tribales, intento desplazarme a lugares remotos donde la mundialización aún no ha llegado. No soy muy malo con los retratos, pero aún tengo que mejorar con los paisajes.

3. ¿Y desde cuando? (¿Cual ha sido tu, digamos, “trayectoria“?)

Comencé hace dos años. Publiqué mis fotografías en mi cuenta de flickr, tuve un gran éxito con mis fotografías de Papúa Nueva Guinea, y un editor francés se interesó en publicar un libro con mis fotografías: Papous. Entonces, Eyedea, una importante agencia de fotografía, me contrató. Desde entonces, he vendido fotografías a Lonely Planet, Times, National Geographic, GEO, The Economist, UNESCO Magazine, etc.

4. ¿Qué te gustaría fotografiar? ¿Qué foto te gustaría poder hacer?

Me gustaría poder fotografiar las tribus sudanesas, pero con el conflicto en Darfur es complicado ir a esa zona con equipamiento fotográfico. 

Me gustaría tener el talento necesario para usar Photoshop mejor de lo que lo hago, ya que, como disparo en Raw y el formato 3FR de Hasselblad, las fotografías necesitan un tratamiento digital. No tengo el talento que tiene uno de mis amigos, Pierre Beteille, que trabaja conmigo a veces.

5. ¿Tienes alguna fotografía “especial” de esas que tienen una historia detrás, y que te gusta especialmente? ¿Nos facilitas un enlace a esa foto? ¿Nos cuentas “su historia”?

Me gustan mucho las fotos de Rashaidas que hice en Eritrea, un grupo étnico que vive en el desierto de la costa del Mar Rojo. Fue muy complicado hacerlas, ya que a ellos no le gustaba que le hicieran fotos, y costó mucho convencerles. Sin embargo, una vez que accedieron, todos querían ser fotografiados, y todos quedaron fantásticos. El problema es que todo se hizo bajo una pequeña tienda, con poca luz, llena de arena, y ocupada por unas 20 personas gritando y queriendo ser el primero en ser fotografiado. Ahora, sin embargo, cuando uno ve la fotografía, ¡da la impresión de que la chica está posando en un estudio!.

6. Cuéntanos algo más. Lo que te apetezca… ¿Una reflexión sobre la fotografía? ¿Un consejo para algún fotógrafo que al ver tus fotos sienta admiración por ellas?

Estoy un poco harto de los discursos sobre fotografía. Los fotógrafos deberían ser más modestos. Una buena fotografía lo es en un 99% debido al sujeto: La gente, el paisaje, etc. El otro 1% lo forman las habilidades técnicas, o la buena iluminación, o la suerte de estar allí en el momento preciso. Ese es mi modo de verlo. 

Si me das una manzana para que la fotografíe, no haré milagros. ¡Probablemente me la coma! Es por eso que quiero dar las gracias a todas aquellas personas que dijeron “Sí” cuando les pedí que posaran.

Nota Extraída de: www.brunoat.com